¿Mal aliento en niños? Te contamos las causas y cómo solucionarlo

La halitosis o la presencia de mal aliento es un problema que muchas personas padecen alguna vez. De hecho, se calcula que en torno a un 40% de la población ha sufrido o sufre halitosis en algún momento de su vida. E incluso existen casos graves de halitosis que pueden generar un problema social, que afecta a la autoestima y a las relaciones sociales con los demás.

En el caso concreto de los niños, la halitosis puede ser algo muy frecuente y muchos padres nos consultan sobre las posibles causas y soluciones.

¿Qué es la halitosis o mal aliento?

La halitosis, o más comúnmente conocido como mal aliento, es todo aquel olor desagradable que proviene de la cavidad oral. Existen varios tipos que se clasifican en función de si esta halitosis es percibida o no:

  • Halitosis genuina: es un mal olor de boca obvio y se identifica claramente.
  • Halitosis persistente: es la halitosis crónica, la cual afecta a la vida normal de las personas que la padecen. Es la halitosis que no se cura con adecuadas técnicas de higiene oral y requiere de tratamiento específico. Su origen puede ser oral o no (aparato respiratorio, digestivo, etc.).
  • Halitosis imaginaria: es una pseudohalitosis, pues se trata de una condición en la que no existe halitosis realmente. Esta condición puede llegar a convertirse en una obsesión, pues el paciente sigue afirmando que la padece a pesar de haber sido tratada y eliminada.
  • Halitosis transitoria: es la halitosis matinal. Su origen es oral, concretamente en el dorso de la lengua y no requiere tratamiento médico. Se produce porque por la noche la cantidad de saliva disminuye y debido al ayuno prolongado. Puede ocurrir también tras comer ciertos alimentos (ajo, cebolla, etc.) o tras hacer deporte.

 

Causas del mal aliento en niños

En general, los niños pueden presentar las mismas causas de halitosis que encontramos en los pacientes adultos.

Las causas de la halitosis en los niños se pueden dividir en dos grupos en función del origen:

  • Oral: se produce cuando existe:
    • Mala higiene oral: la acumulación de restos de comida da lugar a la aparición de bacterias en la lengua, boca y dientes.
    • Gingivitis: inflamación de las encías.

Gingivitis

    • Infecciones dentales por caries o traumatismos dentales; que dará lugar al acúmulo de pus en la boca.
    • Uso de aparatos de ortodoncia, por la presencia de restos de alimentos en este tipo de aparatos. Por ello, es importante limpiarlos y tener una buena higiene, ya no sólo para evitar el mal aliento sino también para evitar la aparición de de hongos orales.
Brackets Metálicos Tradicionales

Brackets Metálicos Tradicionales

    • Xerostomía o boca seca: la saliva ayuda a la limpieza y elimina los malos olores. La xerostomía puede ser producida cuando existe respiración oral, toma de medicamentos, procesos de radioterapia o quimioterapia, etc.
    • Faringitis: inflamación de la faringe como consecuencia de una infección.

 

  • Extraoral: son responsables de una 15% de los casos.
    • Problemas del aparato digestivo: obstrucción intestinal, infección en el estómago, gastritis, reflujo, enfermedades inflamatorias intestinales. También se ha demostrado que la presencia de algunas cepas de la bacteria estomacal Helicobacter pylori, producen compuestos sulfurados volátiles que pueden dar a lugar a mal aliento.
    • Enfermedades sistémicas: diabetes, enfermedades pulmonares, renales o del hígado.
    • Infecciones nasales: sinusitis, rinitis. E incluso se han reportado casos en niños muy pequeños por la presencia de algún cuerpo extraño en la nariz, como la punta de un lápiz.
    • Problemas otorrinolaringológicos: hipertrofia de las adenoides o amígdalas.

 

Cómo combatir el mal aliento en niños

El éxito del tratamiento realizado está directamente relacionado con el origen de la halitosis. Es por ello, que ese debe ser el primer paso, diagnosticar la causa del mal aliento. Por ejemplo, si existe una mala higiene, infecciones dentales o problemas de encías, tenemos que acudir al dentista. Pero hay casos que la causa no es oral por lo que es aconsejable acudir a otro especialista.

En este apartado queremos aclarar sobre el uso de los enjugues bucales para combatir el mal aliento. Si la causa del mal aliento es un problema de encías o periodontal (por bacterias orales) los enjuagues más efectivos son aquellos que poseen ingredientes antimicrobianos de eficacia comprobada (clorhexidina, cloruro de sodio, etc.). El problema es que los enjugues comercialmente disponibles no posee ninguno de estos compuestos de eficacia probada.

Además los padres tienen que pensar que si la halitosis no está relacionada por la presencia de estas bacterias orales, cualquier tipo de enjuague (eficaz o no) camuflará el olor durante cierto tipo debido a la presencia en su composición de ciertos desodorantes como la menta, pero después el mal olor regresa.

 

Cómo evitar la halitosis

Como ya hemos comentado antes, la halitosis puede estar provocada por malos hábitos, por esto, podemos prevenirla con esta serie de consejos:

  • Evitar comidas muy condimentadas y olorosas o ricas en grasa.
  • No comer ciertos alimentos como el ajo o cebolla cruda.
  • Beber mucha agua.
  • Evitar respirar por la boca.
  • Realizar una buena higiene oral. En el caso concreto de los niños, el cepillado dental deberá ser realizado y/o supervisado por los padres.
  • Uso de enjuagues bucales.
  • Cepillado de la lengua y el uso de la seda dental. Existen estudios que indican que estas dos medidas son más importantes en la prevención de la halitosis que el uso de enjuagues bucales.
  • Visitar regularmente al dentista para conservar un buen estado de salud bucal.

En conclusión, si percibes mal aliento en tu hijo, acude al odontopediatra. En clínicas Smile! realizaremos una exploración rigurosa para diagnosticar si esta halitosis es oral o no. No olvidéis que los diferentes tipos de halitosis necesitan ser tratadas en origen y no tiene sentido enmascararlas con productos como enjuagues o chicles, pues el efecto de estos productos es transitorio.

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